La obra del círculo de Lovecraft y la suya propia ha tenido una gran influencia en las obras posteriores de otros autores de terror, han influido en el cine de terror y en la cultura pop. Hablar de Cthulhu y al instante nos encontraremos con la reconfortante imagen familiar de nuestro primigenio favorito (Nota del lector: Bueno vale, prefiero Ygnolac o Hastur, pero se me entiende) dentro de la degeneración que ocurre cuando algo debería de dar miedo al final es “domesticado” al igual que Drácula o el monstruo de Frankestein.
Y aún así, los relatos con toques lovecraftianos tienen algo que nos atraen y siguen en boga, no solo como referencias o guiños sino como relatos auténticamente perturbadores. Por ello no se extraña nadie cuando el mundo del videojuego utiliza de nuevo la referencia del maestro de Providence para dar forma a otro juego. Aunque suelen ser lo bastante inteligentes de buscar nuevas referencias, nuevas criaturas y nuevos mitos para desorientar al jugador. Por lo que en este halloween (Nota del amante del terror: Odiame por que me guste una fiesta extranjera por alabar el género de terror, aunque sea del malo) he podido devorar un juego que me compre hace tiempo y que creo que merece más atención de la que se le da. Estoy hablando de…
Siempre he tenido predilección por las aventuras gráficas clásicas, no porque no haya buenas aventuras gráficas ahora, pero nos hemos encontrado un retroceso en cuanto a dificultad y un acercamiento a un tipo de aventura donde se busca más las opciones morales en detretimiento de los puzzles o de explorar la personalidad de los personajes con largos diálogos como si la apresurada vida actual se hubiese visto plasmada en el videojuego. Y en este caso nos encontramos con un juego entre los dos caminos, creados por un equipo español llamado Game kitchen que dejo el juego para poder ser jugado online o en descarga gratuita. Proporcionándonos la opción de compra en una edición de luego con algunos extras con el tiempo, la cual es la que voy a reseñar.
Las muertes se suceden en la trama mientras buscamos la verdad final
El argumento empieza de forma clásica con un personaje que tras pasar un tiempo en un sanatorio tras sufrir un fuerte ataque y haber sufrido una fuerte amnesia recibe la carta de uno de sus más fieles amigos, amigo de la infancia y compañero de internado, advirtiéndole de un peligro desconocido por lo que temiendo por la vida de su amigo va a hablar con él… A partir de ahí, la historia va cogiendo tonos oníricos, con un personaje que sufre alucinaciones sobre una entidad en forma de cuervo que al parecer protege un umbral.
La locura se vuelve tangible en las acciones de algunos personajes
La aventura se divide en temporadas, una interpretando a Jeremiah Devitt como personaje principal y en la segunda con su psiquiatra y amigo detrás de sus pasos. Entre medias encontraremos todo tipo de descubrimientos siniestros, personajes tétricos y verdades contadas a medias tan del gusto de Lovecraft.
El juego está dividido en 8 capítulos, cada uno de ellos está enfocado a un escenario diferente, con personajes y descubrimientos nuevos. Usualmente se nos muestra una escena del pasado abriendo interrogantes que se responderán dentro de cada capítulo. También he de comentar la utilización de secretos (easter eggs) centrados en la trama, por lo que hay que tener ojo al escenario para poder sacar todos los detalles de la trama.
El sistema de juego sonará a los jugadores más clásicos del point and clic, con recolección de objetos, observación de los mismos para obtener más pistas (no se permite que se examinar todos) y usar/combinar con elementos del escenario u objetos del inventario. También se puede hablar con personajes, desgraciadamente las conversaciones son cortas y no demuestran todo el potencial de los personajes.
Situaciones rocambolescas y tétricas se suceden en la trama, pero todo tiene un sentido
Sin duda los gráficos son el punto flojo del juego, no porque los juegos con pixels no me gusten (es más me retraen a mi infancia y el factor nostalgia ayuda) sino que en este caso los personajes y escenarios se han hecho con un número no demasiado elevado de pixels y puede ser confuso, teniendo que rastrear los puntos calientes a veces a tientas en el escenario.
Pero en cambio, la música y los sonidos son muy atractivos, estando bien acoplados en cada escenario y momento, resultando inquietantes en los momentos de más tensión lo que ayuda mucho a meternos en el ambiente. Además la música con violín y piano es especialmente buena, se nota la contratación de un profesional para el juego.
Las referencias al libro maldito del «Rey de amarillo» se suceden en la trama
Con todos estos datos ¿Qué me ha parecido el juego?
Nos encontramos con una de esas joyas que quedan ocultas por no haber dado más énfasis a los gráficos, si hubiese tenido unos gráficos preciosistas en 2d estaríamos ante un “clásico” de los mitos. Su historia es fascinante y aunque a veces confunda con datos que parecen inconexos terminan engranando con otros proporcionando una visión de conjunto fascinante con una historia que utiliza los ambientes y el estilo de los mitos, pero con un nuevo imaginario bastante interesante. Por lo que si lo veis en oferta o queréis ayudar a la compañía (ya que es bastante pequeña) no creo que os defraude si buscáis un argumento clásico sobre los mitos, eso si, pillaros las dos temporadas y jugadlas seguido, en la segunda hay muchísimas referencias de la primera y se aclaran muchas cosas.
Espero que os haya resultado interesante la reseña y que el vigilante del umbral no os vea a través de la niebla.