No nos vamos a engañar, puede que no en ventas (excepto los más grandes, con franquicias que venden bien), pero si en diversidad de juegos (en mis más de 20 años en el ocio, no he encontrado un surtido tan variado o diferente como lo que estamos viendo desde hace 5 años, quizás unos pocos más), proliferación de pequeñas editoriales (aunque ya sabemos que vienen y van según el mercado, siempre cuesta hacerse un hueco, especialmente con marcas asentadas), muchas más mesas de juego (ahora ya no estamos encerrados en nuestros grupillos, internet a abierto nuevos lugares para jugar) y en general se respira, que si bien se juega muchisimo a las ediciones antiguas y modernas de los clásicos de siempre, si que hay hay más variedad o al menos, cambio de juego entre campañas.
Pero el mundo está cambiando a peor, ha habido varios desastres (covid, guerra, escasez de alimentos, subida de combustibles )que en conjunto a afectado a la sociedad y los que nos quedan. Toda la vida se está encareciendo y una vez más sufren los de siempre. Ergo, no solo tenemos menos dinero para utilizar en nuestro ocio (Normal, el cartón o el papel no se come, ni te da un lugar para vivir), sino que las mismas editoriales les cuesta más sacar un nuevo producto. ¿Pinta feo, verdad? Hablemos de algunos puntos interesantes al respecto

¡Otro nuevo Heroquest 35 aniversario!
No nos engañemos, esto no es de ahora. Desde que te anuncian el juego, te indican lo fantabuloso que es y te ofrecen esos ajustadísimos tiempos de salida hasta que llega a tu correo o a tu tienda de confianza. Pueden pasar muchas cosas. Desde que se pierda en el limbo, por mil excusas (algunas más comprendibles que otras y otras rozando la idea de que el material más duro del mundo es la cara de algunos), que se aplace porque hay imprevistos de última hora (o simplemente que lo que te pidieron por él, no permite pagar costes)… O que te llegue en su momento o incluso antes (Cursed Ink es muy dado a ello por ejemplo).
Por desgracia, todos pagan, justos y pecadores, algunas editoriales con buen nombre, pues tendrán más posibilidades de que se metan porque está la certeza (aunque no toda) de que te llegará en su momento, algunas que ya tienen la negra encima y al menos en los grupos que rondan el internet friki no lo tocarán ni en pintura. Luego tenemos las incógnitas, editoriales nuevas, pequeños autores… todos con mucha ilusión por llevar su producto utilizando el crowfunding tanto para recopilar dinero, justo como publicidad ¿Qué hacer en este caso? Según el juego, según la temática, según el sistema, según el tiempo y ante todo, mirad la fecha de salida. Pero ante todo no le pongáis la negra antes de tiempo. Y recordad, hay juegos para todo el mundo, pero no significa que ese juego lo tenga que ser para ti. El hype es una fuerza poderosa, pero nosotros somos superiores a ella.
Mira, la décima edición del juego de siempre… ¡Me la compro!
La nostalgia vende, vende mucho y muy bien. Perdonando cosas que de otra forma no haríamos o al contrario, odiándolo porque ha «traicionado» la esencia del juego. Es feo nombrar juegos con cierta solera, pero me he encontrado con más de un juego cuya idea de edición es añadir/eliminar cuatro cosas, ponerle un arte diferente y tirando millas (véase la segunda edición de Kult, y mira que me gusta Kult). Luego tenemos los que han dado un gran repaso de cara y claro, son muy diferentes al juego que nos ofrecieron en su momento, pero manteniendo en general su esencia (véase, Midnight, juego reciente que se ha llevado varias críticas por hacerlo más heroico y «sencillo» de lo que era, que sea mejor o peor, cuestión de gustos).
No nos vamos a mentir, comprar una nueva edición es una apuesta segura para un rolero, especialmente del jugador clásico (nada mejor para ejemplificar estos, que ver como se han revitalizado campañas o aventuras clásicas de la Llamada). Tienes el factor nostalgia, con un toque diferente en algunos casos o simplemente un lavado de cara. Es algo reconfortarte, no nos vamos a engañar.
Pero yo creo que una nueva edición es una oportunidad para actualizar, modificar, dar una nueva visión de otro autor sobre la obra anterior. Que no nos ciegue la nostalgia, no todo tiempo pasado fue mejor, ni todo producto antiguo es perfecto tal y como está.
Mi consejo, mirad muy bien comprar una nueva edición, especialmente si los añadidos no son de suficiente entidad y si son de gran entidad, probadlo antes para ver si encaja en vuestro estilo de juego.
¿Como que mi juego no ha salido? ¡Lo quiero ya!
Desde hace un tiempo vivimos en una cultura individualista, con una necesidad de inmediatez y usualmente con una empatia que ronda lo reptil (perdón por los reptiles) y así nos va. No todo es inmediato, todo tiene su proceso y en estos momentos de crisis, ni las editoriales más previsoras saben sino van a tener un altibajo (mucho más nuestras pequeñas editoriales españolas). Por desgracia, es muy normal que pidamos que el juego salga enseguida, te montas en el hype, tu mente se llena de aventuras que jugar con el nuevo juego y con el paso de los meses pues este sentimiento se evapora. Sí, incluso los suplementos, algo que da la vida a un juego, proporciona nuevas vueltas de tuerca, se diluyen al ritmo del hype. Por eso las líneas se abandonan, u ofrecen comprar un todo en uno.
Yo mismo tengo una gran ludoteca y soy coleccionista, pero no llego a extremos exagerados. Pero no me gusta dejar esos juegos como mariposas clavadas al papel, sino que vuelvo a darles una nueva vida de vez en cuando, aunque solo sea leerlos te proporcionan una necesidad de volver a jugar… Y la espera, es eso, solo tiempo. Solo me resulta sangrante cuando pasa mucho tiempo y no hay señales de vida (sabemos que habrá chaparrón de críticas, pero es mucho mejor eso, que cuando llegue el juego vaya directamente a segunda mano). Por lo que si, pidamos nuestro juego, pero tengamos paciencia y demos oportunidades a nuestra ludoteca. Nos quemaremos menos.
¿Que este libro no tiene ilustraciones detallista? A la hoguera.
Respecto a las ilustraciones ya hable en su momento en otro artículo, pero es uno de los factores por los que cada vez valgan más los juegos. De los parcos manuales de los inicios de rol a libros de ilustraciones (y por supuesto, con bastante menos cantidad de letra). Ojo, algunos libros no serían lo mismo sin sus ilustraciones, Historias del Bucle, por poner un ejemplo, ambienta gracias a ella. Las criaturas del horror incesante no serían igual de terribles sino tuvieran esas ilustraciones tétricas… Y aún así. ¿Cuantas veces en la partida vas a abrir el libro para mostrar esa ilustración a los jugadores? Ergo, al final es para maravillar al director y que disfrute de la lectura. Se agradece, sino fuera que encarece bastante la obra.
Y llegamos a veces en una saturación de ilustraciones, páginas a colores (que en caso de ser oscuros las dedadas se quedan), maquetaciones vanguardistas, pero que molestan a la lectura… Al final estamos en una guerra armamentística pictórica, donde una vez más los pequeños flaquean. Aunque también he de decir que muchos juegos indies con dibujos en blanco y negro me resultan más agradables que dibujos saturados a color. Es por gustos, aún así como digo, más importante es el contenido que el continente.
El duro camino de la editorial rolera
Todo tiene un final y muchas editoriales roleras terminan desapareciendo. El rol no es algo que ofrezca especialmente dividendos. Somos poquitos los que ampliamos el rango de compra de los juegos con más publicidad (en los crowfundings españoles, una media de 400 ya es una buena noticia). Muchas editoriales lo hacen por gusto, por una extensión de su afición (nos gusta este juego, quiero que lo vea la mayor cantidad posible de gente), otras que han intentado profesionalizarse, han tenido variedad de resultados. También hay que estar ojo avizor a los comportamientos de los integrantes de la misma, ya no son simples usuarios que despotrican de tal o cual juego, mantenerte profesional especialmente con gente fanática de algo suele costar, todos tenemos malos días. O por el contrario, a veces necesitas que como al Cesar te digan por detrás que eres un simple mortal.
Si hay una crisis especialmente grave (o una conjunción de «pequeñas» crisis), pues caerán las pequeñas, quizás las medianas editoriales y permanecerán las grandes, sobre todo las que además de rol tienen otro tipo de productos y venden bien. Gente como yo tenemos rol para jugar toda la vida, pero es como los videojuegos o películas o series o… Si paráramos ahora mismo y nos pusiéramos con todo ello jamás terminaríamos de llegar a todo ¿Entonces no deberíamos producir más? Y cuantas cosas buenas y autores excelentes nos perderíamos porque no necesitamos nada más. Por lo que sí, aunque sea fuera del circuito editorial, espero que se siga produciendo rol, que en este ocio la línea profesional/amateur es muy difusa, usualmente para bien.
Crisis en chino está escrito con los caracteres «peligro» y «oportunidad»
En las crisis, podemos ser arrastrados por la corriente o podemos amoldarnos a ellas y vadearla. Por ejemplo unión de fuerzas en entre editoriales, centrarse en ciertos productos para no pisarse, cambios de modelo de mercado (un drivetrhu hispano estaría muy bien, así supliríamos a los que quieren juegos de calidad de exposición y los que quieren más para el traqueteo de mesa), volver a un apoyo mejor entre tienda y editorial (que nunca ha sido parejo entre ellos, una pena) etc… etc… Sí, se que suena utópico, pero mejor pensar en la utopía e intentarlo que movernos en el mismo da.
Y sé que el rol no se va a morir por perder editoriales, incluso si desaparecieran todas, tendríamos muchos juegos a los que seguir jugando, podríamos comprar del extranjero, buscar productos gratuitos (que poco les damos, por cierto), pero no sería lo mismo. Sí, se que estamos saturados, especialmente de básicos (que se venden mucho mejor que los suplementos, que se le va a hacer). Y aún así, nuestro mercado solo raspa muy ligeramente tanto el potencial que tenemos, como joyitas que podemos encontrar afuera. Espero que nos podamos amoldar a la situación y aunque no haya tantas novedades y el ritmo sea mucho más sosegado, sigamos encontrando más productos nuevos.
Conclusión de la disertación
Algunas opiniones que ofrezco en este artículo son cuanto menos… particulares. Y como opiniones son mías, se puede estar de acuerdo o en desacuerdo. Aunque tendemos a la radicalización en algunos casos, tengo que aclarar. Mis gustos son míos, hay gente que adora comprar cosas de su juego preferido y solo de su juego preferido, yo al contrario soy una persona dispersa (sino mirad el blog…), hay gente que disfruta caminando por camino seguro para no encontrarse chascos, todos tenemos un tiempo para el ocio y no quieren darse de cabezazos con algo que a lo mejor no les mola. Yo por el contrario soy un culo de mal asiento y voy de flor en flor, me he encontrado chascos pero también muchos juegos maravillosos que de otro modo me habrían pasado desapercibidos. Hay personas que tienen editoriales predilectas y que compran sus productos porque lo tienen como sello de calidad, yo me muevo más porque me interese ambientación… sistema ya algo menos. Y tampoco es malo.
Esto no va de salvar al rol, ni de que el rol se muere, ni de como deberías jugar al rol ni de otras tantas discusiones sobre buenos y malos. Las editoriales y sus productos son una parte del rol, mejor o peor llevado, al final es otro elemento importante dentro de mi ocio, por lo que es normal que me preocupe y que espere lo mejor para todos. Pero es que soy así de iluso.